domingo, 3 de agosto de 2014

Sábado en la noche: Visitando el templo Sikh

El sábado en la noche había decidido quedarme en el apartamento ya que la gente que he conocido vive en Delhi, al lado de mi ciudad. Sin embargo ya entrada la noche algunos amigos dijeron que vendrían por mí y saldríamos. Es mi primer fin de semana aquí, así que dije sí de una.

El primer reto de la noche fue decidir qué vestiría. Como occidental recién llegada, siempre tengo el temor de hacer o decir algo que vaya en contra de su cultura o que pueda ofenderlos, y me han dicho tantas cosas que prefiero ser cuidadosa mientras conozco cómo es realmente este lugar. Así que decidí usar jeans y una blusa holgada con mangas, con un collar que me diera algo de presentación porque después de todo era sábado.

La primera parada de la noche fue en un restaurante. Dado que no conozco los platos y no entiendo la mayor parte de los menús, le pedí a mis acompañantes que pidieran por mí. Aunque la comida era familiar, tenía ese sabor picante característico de la comida aquí. Afortunadamente tenía un gran vaso de soda a mi lado.

Nuestra siguiente parada: Gurudwara Bangla Sahib, un templo sikh ubicado en Delhi. Debo decir que quedé encantada con ese lugar. Es absolutamente hermoso. Dejamos nuestras pertenencias y nuestros zapatos en el carro porque se debe entrar con los pies descalzos. Al entrar debes lavar tus manos y tus pies, y usar una pañoleta para cubrir tu cabeza (hombres y mujeres). Al ingresar las personas se inclinan y tocan el piso con una de sus manos. Al parecer, anoche no era una noche normal en el templo; había más gente de lo normal de acuerdo a lo que me contaron. No podía entender lo que decían pero en todo el lugar se sentía la voz de alguien hablando constantemente, mientras los presentes se congregaban alrededor y se inclinaban apoyados en sus rodillas tocando el piso con su cabeza. Y como donde fueres haz lo que vieres, decidimos unirnos.





A un lado del templo había una pequeña habitación, encerrada en vidrio, y dentro una cama con telas rosadas. De acuerdo a lo que me contaron, en el sikhism se cree que Dios viene a dormir allí en las noches. Al salir de la parte principal del templo hay un gran estanque, cuyas aguas se considera que limpian y curan. La gente se para al borde y lava sus pies y su cara. Algunos entran completamente y toman un baño. Alrededor de este estanque hay pasillos con arcos (algo parecido a las bóvedas en Cartagena) donde las personas pobres llegan a dormir. Este templo también cuenta con un restaurante que funciona 24/7 y alimenta a los pobres, su única condición es que todo lo debes comer allí. Sin duda en este lugar se respira paz y mucha tranquilidad.


Nuestra última parada de la noche fue cerca de India Gate, un gran arco en honor a los soldados indios fallecidos en diferentes guerras. Pero de este lugar les contaré en otra ocasión.

Gracias Neelansh, Karan y Rishab por mostrarme un lugar tan maravilloso en India y por hacerme pasar un rato tan agradable y divertido junto a ustedes.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario